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Volkswagen Jetta, análisis plazas delanteras

Al sentarnos a los mandos del Volkswagen Jetta encontramos un volante de agradable tacto que puede regularse tanto en altura como en profundidad, algo que ya es completamente habitual en cualquier modelo a partir del segmento de los compactos. No obstante, la multitud de reglajes de los asientos y el buen diseño de los mismos permite obtener una postura de conducción adecuada independientemente de la talla del conductor, y es que existe regulación en longitud, altura, inclinación y lumbar, añadiéndose a todo ello una más que destacable sujeción lateral.

 
Otra virtud del puesto de conducción radica en el volante, cuyo diseño ya nos indica cual es la postura adecuada para situar las manos gracias a una protuberancia especialmente destinada a los pulgares. Situando las manos en la zona adecuada podremos manejar fácilmente los botones del sistema de infotainment o los diferentes sistemas de los que podemos disponer en el coche, como el control de crucero o el manejo del teléfono mediante bluetooth.
 
En nuestra unidad de pruebas la caja de cambios era manual robotizada de doble embrague, el ya famoso DSG, que permite una utilización manual en la propia palanca posicionando ésta hacia la derecha del conductor y aumentando de marchas hacia delante y reduciendo hacia atrás. Pero el uso manual del cambio es tremendamente más gratificante utilizando las levas ubicadas tras el volante, con las reducciones a la izquierda y la leva de la derecha para subir marchas.
 
 

 
Entre el asiento del conductor y del acompañante se sitúa un reposabrazos fijo y, delante de él, un hueco para posavasos o para el cada vez más en desuso cenicero portátil. Que el reposabrazos no tenga regulación es un demérito del vehículo aunque el hueco disponible bajo el mismo sea bastante amplio. La guantera también ofrece un buen espacio para guardar impedimenta, contando en su interior con el sistema de conexión/desconexión del airbag del acompañante, que facilita su uso frente a otros que lo sitúan en el hueco de apertura de la puerta delantera derecha. Por otra parte también encontramos en la guantera una toma usb para, por ejemplo, recargar el teléfono móvil. Como elemento de confort la guantera dispone de una salida directa del aire acondicionado que podremos utilizar para mantener latas frescas en su interior.
 
El aspecto general del interior transmite calidad en la realización a pesar de que los materiales no ocultan su procedencia. Y es que da la sensación que en el diseño general se ha buscado más dicha sensación que una estética vanguardista o vistosa. La famosa sobriedad alemana está así presente en el Jetta, que gracias a la presencia de elementos como el navegador (cuando existe) o los acabados en símil metálico de puertas y salpicadero consigue no caer en la austeridad, pero siempre quedando lejos de automóviles mucho más "aventureros" en este sentido como pueden ser por ejemplo los vehículos coreanos. Aun así, modelos como el Ford Focus o el Opel Astra aportan igualmente mayor vistosidad al interior sin perder por ello la sensación de calidad. 
 
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Publicado el: 18/01/2013
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