Pero esta gran oferta automovilística no está exenta de polémicas. Si bien en nuestro país hablamos mucho de que "te engañan como a los chinos" en realidad son estos últimos los que en muchas ocasiones "nos engañan como a tontos", y el sector de automoción no es una excepción. Pasear por determinados salones internacionales y ver vehículos prácticamente idénticos a otros muy conocidos pero de procedencia china es una constante a la que aún no nos hemos acostumbrado. En las siguientes páginas puedes ver algunos ejemplos de coches chinos que bien podrían pasar por ser BMW, Lexus, Opel, Mini o, rizando el rizo, Rolls Royce.