Audi inicia en Ingolstadt la producción de su nuevo SUV, el Q2
Por Carlos Antón Adán
Esta misma semana tenía lugar en Ingolstadt (Alemania) el pistoletazo de salida a la producción de uno de los modelos de Audi que más expectación ha levantado en los últimos tiempos. No hablamos de la nueva generación del A8, ni tan siquiera de un deportivo RS o S, se trata del benjamín de la familia SUV, el Q2.
El modelo, que fue presentado en la pasada edición del Salón de Ginebra, tendrá como planta de producción la joya de la corona de Audi, la fábrica de Ingolstadt. De allí, de una misa línea de montaje compartida con el compacto A3, saldrán hasta 450 unidades diarias del Q2, una cantidad que se alcanzará de forma gradual, según ha desvelado la propia compañía.
De esta forma, la principal fábrica de Audi, que cuenta actualmente con una producción diaria de más de 2.500 vehículos, sienta las bases para un futuro mejor. No en vano, para llegar a producir el Q2, sus instalaciones han recibido unas importantes mejoras que han permitido lograr una sabia compatibilización de la línea de montaje en la que también se fábrica el popular A3.
Recordemos que el Q2 supone la primera incursión de Audi en el terreno de los B-SUV. Con una longitud de 4,19 metros, el Q2 se sitúa a medio camino entre el A1 y el A3, estrenando un original e inconfundible diseño, más juvenil y menos sobrio que otros modelos de la familia SUV, como el Q5. Por su parte, desde Audi proponen una completa oferta mecánica formada por 3 opciones diésel TDI y 3 gasolina TFSI, una gama que se abre con el tricilíndrico 1.0 TFSI de 116 CV, cerrándose por arriba con el 2.0 TFSI de 190 CV.