BMW X5 M y X6 M 2014

Antagonismo deportivo

La marca automovilística está jugando con los contrastes, ya que con los nuevos X5 M y X6 M aúnan dos conceptos que tradicionalmente pueden ser antagónicos como son la máxima deportividad con el confort y el espacio de un vehículo todoterreno. BMW ha querido romper moldes con la versión sport M de estos todocaminos, que reciben una nueva estética más agresiva y que montan un motor de altas prestaciones, con el fin de convertirse en un vehículo muy dinámico pero que se pueda utilizar en la vida diaria de los clientes.

Ambos modelos mantienen la línea de vehículos todocamino pero han recibido diferentes modificaciones orientadas a aumentar su agresividad en la carretera y para hacerlos atractivos a los amantes de las sensaciones fuertes al volante. Así, los dos vehículos cuentan con unas grandes entradas de aire delanteras, así como con flaps en la parte frontal y con difusor trasero, elementos que ayudan a mejorar la resistencia aerodinámica y a obtener una gestión óptima de la temperatura del motor y de otros componentes.

Dentro del habitáculo se ha optado por ofrecer un aspecto completamente deportivo, pero siempre con la vista puesta en la ergonomía tanto del conductor como de los ocupantes. Por ello, tanto el BMW X5 M como el X6 M utilizan un nuevo volante deportivo M con levas para el cambio de marchas, mientras que la palanca selectora M también tiene un diseño exclusivo, al igual que el tablero de instrumentos o los mandos de funciones múltiples situados en el propio volante. Otros elementos exclusivos son los asientos delanteros con regulación eléctrica y tapizados con piel merino.

A pesar de contar con una estética que llama poderosamente la atención, la principal seña de identidad de estos dos modelos se encuentra bajo el capó. Así, estos todocaminos montan un propulsor de gasolina de V8 de 4.4 litros que desarrolla una potencia máxima de 575 caballos, lo que le convierte en el motor más potente de la historia de la firma alemana para un vehículo de tracción total. Además, representa un aumento del 4% en comparación con la potencia de la edición anterior, mientras que el par motor se ha incrementado un 10%.

Con esta motorización, tanto el X5 M como el X6 M tienen una aceleración 0-100 km/h de 4,2 segundos, mientras que su velocidad máxima se sitúa en 250 kilómetros por hora (limitada de forma electrónica). A pesar de contar con estas prestaciones deportivas, el consumo de combustible y las emisiones de dióxido de carbono (CO2) se han rebajado en un 20%, de manera que se sitúan en 11,1 litros por cada cien kilómetros y en 258 gramos de dióxido de carbono por kilómetro, respectivamente.

Como tecnologías que mejoran la dinámica de conducción deportiva y la seguridad, ambos vehículos montan una transmisión automática de doble embrague M Steptronic de ocho velocidades y también utilizan la tracción integral a las cuatro ruedas xDrive de la firma alemana, así como el control dinámico de estabilidad y un nuevo chasis con suspensiones adaptadas. La empresa alemana ha optado por incorporar neumáticos de diferentes tamaños en el eje delantero y en el trasero de estos automóviles con el fin de obtener el máximo comportamiento dinámico, junto con un sistema de frenado de alto rendimiento y con una dirección M de adaptación personalizada.

Entre los elementos de equipamiento disponibles en estos modelos se encuentran las llantas de aleación de 20 pulgadas (21 pulgadas como opción), así como el accionamiento automático del portón trasero, los espejos retrovisores con función antideslumbramiento, el asistente al aparcamiento Park Distance Control, la cámara de visión trasera con función surround view o la nueva generación del dispositivo de navegación Professional.