La marca de los chevrones
no quiere que nos olvidemos de su C5, el turismo que actualmente se sitúa en la parte más alta de su oferta de modelos, tras la salida de sus filas del
DS 5 al convertirse
DS en marca independiente. Para ello
ha decidido retocar la estructura de su gama,
añadiendo a su vez
un buen número de elementos a su dotación de serie. Unas mejoras que afectan tanto a la carrocería berlina, como a la Tourer XTR.
Desde ahora dentro de su gama podremos distinguir entre 3 diferentes niveles de acabado:
Feel, Feel Edition, y Shine. Desde el primero de ellos ya encontraremos a nuestra disposición un completo equipamiento de serie, incluyendo
control de tracción inteligente,
regulador y limitador de velocidad, proyectores halógenos con
iluminación adicional en curva, control de presión de neumáticos, encendido automático de
luces, limpia parabrisas automático y
retrovisores exteriores abatibles eléctricamente, entre otros elementos.
A su vez, la serie especial
Shine Edition añade otros atractivos elementos, como el clima automático bizona,
sensores de parking delanteros y traseros,
llantas de aleación de 17” pulgadas, y
sistema multimedia con navegación, pantalla táctil de 7” pulgadas y connecting box.
En cuanto a las mecánicas, Citroën ofrece dos únicas opciones, y ambas diesel. Hablamos del BlueHDi de 150 CV con cambio manual de 6 velocidades, y el BlueHDi 180 con caja automática EAT6. Ambas destacan por su buen comportamiento y sus bajos consumos, homologando en ambos casos consumos por debajo de los 4,5 litros a los 100 km en régimen mixto.