Citroën, o mejor dicho DS, sigue empeñada en labrarse una imagen premium que le permita luchar con garantías frente a los dominadores de dicho mercado. Por ahora, y sin contar los actuales DS de producción, que todavía necesitan más trabajo para poder considerarlos premium, ha ido presentando diversos prototipos a los largo de los años que buscan, a base de mostrar tecnología y acuerdos con marcas de renombre como la fábrica de cronógrafos BRM o Focal para el tema de equipos de audio, potenciar esa imagen que aleje a esas dos siglas, DS, de su ‘madre’ generalista, la francesa Citroën. Todavía les queda camino por recorrer, al menos para quien esto escribe, pues no solo hay que trabajar en los coches, sino en otras nimiedades como los catálogos (las grapas no son premium, las tapas duras o semiduras si), los concesionarios y demás detalles que acompañan a la adquisición de un coche y que refuerzan aún más esa sensación de comprar algo especial.
Por ahora, lo que más destaca de los conceptos que ha ido lanzando DS a lo largo de los salones del automóvil es el diseño, desde luego que muy cuidado y muy prometedor, como aquel DS Número 9 de 2012, o el Divine DS presentado en París de 2014. El Salón de Ginebra 2016 también acoge otro concepto por parte de la firma DS, el E-Tense, un deportivo con motor eléctrico que sigue con la evolución del diseño que ha ido caracterizando a los todos los prototipos de la marca y que podría terminar en modelos de producción realmente bonitos. No se porque, pero la verdad es que al leer los datos del E-Tense y ver sus imágenes, me ha venido a la cabeza el Citroen Survolt de 2010, un deportivo espectacular que tambien tenia motor eléctrico y que realmente, se parece bien poco al nuevo DS E-Tense. Quizá haya sido por la idea de un deportivo con motor eléctrico.
No obstante, para cerciorarme de que mis recuerdos andan bien encaminados y que el Survolt podría tener algo en común con el nuevo E-Tense, he vuelto a leer los datos de aquel y a ver sus imágenes, para darme cuenta que estéticamente, muy poco, pero sí podría servir para comparar la evolución de los motores eléctricos dentro de PSA en estos seis años que han pasado. Esto se me ha ocurrido mientras leía los datos del Survolt y recordando los deportivos eléctricos que han ido apareciendo y los que veremos en Ginebra, ya que todos anuncian potencia altísimas y velocidades respetables, pero siguen pecando de lo mismo.
Centrándonos en el DS E-Tense que se verá en Ginebra, estamos ante un deportivo desarrollado alrededor de un monocasco de fibra de carbono con suspensiones de dobles triángulos y batería situada en el piso, que anuncia 402 CV y 516 Nm junto con una autonomía de 320 km. No se habla de tiempos de carga, solo de prestaciones, con un 0 a 100 en 4,5 segundos y una punta de 250 km/h. Todos los fabricantes, o al menos casi todos, chulean de potencia, pero parecen haberse olvidado del mayor problema de los coches eléctricos: la recarga. Casi nadie está dispuesta a sufrir esperas de más de seis horas para poder tener la batería completa, ni siquiera dos horas para tener el 80%, cuando con un motor convencional se tarda 10 minutos, contando con pagar antes de irnos y todo. Estoy seguro que la gente podría admitir autonomías de 300 km si las recargas duraran esos 10 minutos.
El mejor ejemplo lo tenemos en el mismo Citroën Survolt de 2010, que anunciaba una potencia de 300 CV y una autonomía de 200 km, lo que supone una ganancia de 102 CV y 120 km en el E-Tense, pero las cargas siguen igual, pues el concept de Citroën se cargaba al 100% en cosa de ocho horas, diez si queríamos un extra de energía de reserva, mientras que para tener el 80% había que esperar dos horas. Son las mismas cifras que anuncian los fabricantes actualmente, eso sin contar Tesla claro, ellos van por libre.
Pero voy a volver al DS E-Tense que es realmente la novedad con la que siguen trabajando en esa imagen de marca. Lo que más destaca de este modelo no es ni su motor ni sus prestaciones ni tampoco su diseño, sino su habitáculo del que no tenemos ni una sola foto, sin duda esperando a que llegue marzo para mostrarlo. ¿Y por qué digo que destaca sin verlo? pues por la información que facilita la propia marca donde afirman que han tardado 800 horas para llegar al resultado final, lo que supone un esfuerzo importante. Como ejemplo del que además hemos hablado hace muy poco, Bentley tarda 137 horas en completar el interior de un Mulsanne totalmente a mano. Por eso no facilitan imagenes, porque ahí es donde reside el auténtico trabajo.
Igualmente hablan de tecnología, como el sistema DS Active LED Vision, que son unos faros LED activos que modifican la intensidad de iluminación según condiciones y que además pueden girar hasta 180º, un pequeño guiño a los faros direccionales del ‘Tiburón’.
Toca esperar para poder tener más información sobre el DS E-Tense, aunque no creo que termine en producción, como ha pasado con todos sus hermanos presentados anteriormente, aunque sí que servirá para que nos hagamos una idea del aspecto de los próximos modelos de la firma DS.
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