Así funciona el Lamborghini Asterion

Por David Ayala (periodistamotor)

Híbrido en potencia y tracción

Lamborghini Asterion

El Lamborghini Asterion es un deportivo de altas prestaciones pero también es un híbrido enchufable que transmite la potencia a las cuatro ruedas... pero no siempre.

Comencemos por el principio. El nombre completo de este superdeportivo es Lamborghini Asterion LPI 910-4. Los curiosos apellidos del Asterion son en realidad una declaración de características técnicas, pues dispone de un motor Longitudinal Posterior Ibrido (híbrido en italiano) de 910 CV y tracción a las 4 ruedas.

Las posibilidades prestacionales de este vehículo provienen de la unión de un motor atmosférico V10 con 5,2 litros y tres motores eléctricos, ofreciendo entre todos ellos una potencia de 910 CV que permiten impulsar al Asterion hasta los 320 km/h con una aceleración de 0 a 100 km/h en sólo 3 segundos.

Con la posibilidad de realizar hasta cincuenta kilómetros en modo completamente eléctrico, la tracción del Asterion en dichas circunstancias es únicamente delantera. Pero cuando el conductor así lo requiere, el motor V10 ubicado longitudinalmente por delante del eje posterior pasa a cobrar vida para transmitir su potencia a través de un cambio pilotado de doble embrague a las ruedas posteriores, haciendo así que el Asterion disponga de tracción integral a las cuatro ruedas.

En modo eléctrico son dos motores eléctricos ubicados cada uno en una rueda delantera los que impulsan al vehículo, mientras que al activarse el modo híbrido entra también en funcionamiento un motor eléctrico situado entre el V10 y la caja de cambios que actúa igualmente como generador. La potencia del motor térmico es de 610 CV mientras que la combinación de los tres motores eléctricos aporta los 300 CV restantes para el total de potencia disponible en este curioso y espectacular deportivo.

El arranque del Lamborghini Asterion se realiza, cuando el modo híbrido es seleccionado, únicamente en modo eléctrico, pudiendo alcanzar con esta propulsión hasta 125 km/h y tener una autonomía de 50 kilómetros, aunque si quisiéramos apurar la batería en su velocidad máxima la autonomía quedaría claramente reducida.

La tecnología incorporada a la mecánica del Asterion viene acompañada de un chasis de fibra de carbono para reducir al máximo el peso. Sobre la estética no vamos a hablar, una imagen vale más que mil palabras.

Autor: David Ayala