El Discovery era el único modelo de la firma británica de aventureros automóviles que aún no había recibido el nuevo lenguaje de diseño de la compañía. La cuarta generación mantenía aún una buena parte de los rasgos del Discovery 3, que llegaba al mercado en 2004, por lo que el modelo pedía a gritos esta renovación. Una renovación que se ha hecho esperar, pero que con solo una mirada sabemos que esa espera ha merecido la pena.
El nuevo
Land Rover Discovery luce unas líneas más modernas y redondeadas, ofreciendo
un estilo con carácter y elegancia. El frontal una parrilla y unas ópticas muy similares a las de su hermano pequeño, el Discovery sport, mientras que el paragolpes goza de un diseño
más contundente, con un aspecto de mayor solidez. Idéntica circunstancia se da en el perfil, donde encontraremos unos rasgos familiares pero con un trazado más musculoso.
La zaga es el área más distintivo del nuevo Land Rover Discovery. Allí encontramos reminiscencias de su pasado de
todo terreno puro, como el
portamatriculas situado en el lateral izquierdo del portón, dejando el espacio donde
antaño encontrábamos la rueda de repuesto. También encontraremos unos pilotos de mayores dimensiones y una parte final del techo completamente recta, por lo que podremos disfrutar de
hasta 7 plazas absolutamente reales.
Con unas dimensiones de
4,97 metros de longitud,
2,9 metros de batalla y
2,1 metros de altura el nuevo Discovery se plantea como
la referencia en habitabilidad dentro de su segmento, como avanza el propio fabricante. Ofrece
7 asientos para 7 adultos, y una capacidad de
maletero de 258 litros con esas 7 plazas en uso,
1.231 litros si solo usamos 5, y hasta 2.500 litros en el caso de usar únicamente las dos delanteras, plegando el resto.
Los interiores están a la altura de lo que se espera de esta firma Premium.
El cuero, la madera o el aluminio se encuentran entre la lista de materiales más empleados en su elaboración. Tampoco se queda atrás en tecnología, disponiendo del nuevo sistema
infotainment de
Land Rover, el
InTouch Pro, instrumentalizado a través de una pantalla táctil de 12,5” pulgadas y ofreciendo lo último en conectividad, incluyendo WiFi.
La tecnología es también clave a la hora de sacar el máximo partido en su conducción. El SUV
no pierde su alma aventurero y ofrece avanzados sistemas de conducción en condiciones adversas, como el
Terrain Response 2 o el All Terrain Progress Control, un eficaz
control de crucero diseñado para un uso específico en conducción todo terreno.
El catálogo mecánico está compuesto por
3 opciones diesel y 1 gasolina. En diesel encontramos los
2.0 TD4 y SD4 con 180 y 240 CV respectivamente, además del
3.0 TDV6 de 258 CV. Mientras que en gasolina nos encontramos únicamente con el 3.0 Si6 de 340 CV. Todas estas mecánicas se encuentran relacionadas con una
caja de cambios automática ZF de 8 relaciones.
La severa dieta a la que se ha sometido el Discovery,
perdiendo 480 KG de peso, unida a la alta eficiencia de estos motores, logran que los consumos del modelo sean asombrosamente bajos. Sin ir más lejos, el Discovery TD4 de 180 CV homologa un
consumo mixto de 6 litros a los 100 km, subiendo a 6,3 en el caso del SD4 de 240 CV.
El nuevo Land Rover Discovery llegará a España en la próxima primavera. La firma británica ya acepta pedidos para esta nueva generación con un precio que parte de 56.150 euros.