Acudir siempre al taller
Aunque seamos unos manitas, lo mejor es que acudamos a nuestro taller de confianza para arreglar los cristales de las ventanillas laterales de nuestro coche. Normalmente la reparación requiere el desmontaje y montaje de la puerta y puede resultar peligroso para nuestros dedos si no somos profesionales. También una mala reparación puede suponer la rotura de otro elemento del vehículo que no estaba averiado.
Evitar la rotura del elevalunas
Si la rotura del elevalunas te pilla en carretera te puedes quedar con la ventanilla a medio bajar o subir. Una solución provisional hasta que vayas a un taller es intentar subir el cristal con la ayuda de un destornillador. Hay que subir el cristal con las manos y una vez que esté arriba coloca la punta del destornillador entre el vidrio y el revestimiento interior de la puerta, haciendo cuña. Una forma provisional de impedir que se caiga. Recuerda que el problema debe ser arreglado los profesionales en el taller lo antes posible.