Porsche Cayenne Diésel (análisis de interiores)

 

Se ha hecho un trabajo excelente en el diseño del puesto de conducción, pues además de dar esa imagen de coche más pequeño que comentábamos antes también aporta un ambiente de deportividad que a buen seguro será del gusto de los amantes de la marca.

 

 

 

El cambio automático con cambio de levas en el volante no sólo funciona bien, también es bastante fácil e intuitivo en su manejo, aunque habremos de acostumbrarnos a ellos porque también en el volante disponemos de muchos otros botones para manejar el complejo sistema de infotainment del **porsche cayenne**.

 

Para el final hemos dejado además el aspecto de la habitabilidad interior, un punto que será muy valorado por la familia y que es el que ha dado al Cayenne el empujón requerido para ubicarse en sus buenas cifras de ventas. La inclinación de los respaldos posteriores puede regularse, mientras que la banqueta trasera dispone de regulación longitudinal. Así, independientemente del tamaño de los ocupantes se puede encontrar fácilmente un buen acomodo. Bien terminado también en la zona posterior, la existencia de pequeños pero variados detalles hace que viajar en el asiento trasero del Cayenne sea igualmente apetecible y confortable.

 

Y por último tenemos también la posibilidad de abatir los asientos posteriores para ofrecer un espacio de carga más amplio y polivalente.