El pasado mes de abril no ha sido fácil en el mundo del concesionario. Con apenas 17 o 18 días hábiles -según zonas- de cara a matricular, alcanzar los objetivos marcados por las distintas marcas se ha convertido en todo un reto. Un hecho claramente reflejado en el registro mensual de matriculaciones, que apuntaba un ligero ascenso en abril de un +1,2%.
Según datos facilitados por ANIACAM, el mercado español de turismos lograba alcanzar la cifra de 102.106 unidades matriculadas, frente a las 100.914 registradas en el mismo periodo del 2016. Más notable es el crecimiento acumulado al cierre del primer cuatrimestre, de un +6,1%, con 411.706 unidades matriculadas.
El canal de particulares, el más importante del mercado, se desinflaba con fuerza en abril. Con 45.384 unidades matriculadas, este canal perdía un -14,5% si lo comparamos con el registro firmado hace justo un año. De no ser por los canales de alquiladores y empresas, que crecen un +35,8% y un 4,9%, respectivamente, ahora mismo estaríamos hablando de un gran descalabro en el mercado en abril.
El mix de carburantes sigue al rojo vivo. Las cuotas de mercado de
gasolina y de
diesel se separan por apenas 0,1 punto (49,8% VS 49,9%),
dejando a la gasolina a punto de merendarse al diesel. El 0,3% restante representa a los eléctricos, que siguen si conseguir despegar del todo.
En este complejo escenario,
SEAT saca pecho y se proclama líder absoluto en abril, con 10.497 unidades frente a las 8.130 de
Peugeot, segundo clasificado.
Opel, con 7.538 unidades, se hace con el tercer lugar del cajón.
El SEAT Ibiza se convierte en el modelo más popular. Aprovechando el tirón de la fase final del ciclo de vida de la actual generación logra matricular 4.950 unidades. A una distancia más que prudencial, con 3.723 unidades encontramos a su hermano el León, mientras que el Opel Corsa cierra el podio con 3.148 unidades.