Durante el pasado
Salón de Ginebra,
Skoda nos presentaba
su Vision S, un concept que serviría para marcar el camino a
la nueva apuesta SUV de la firma checa. Una apuesta de la que ya conocemos su denominación oficial:
Skoda Kodiaq.
Compartiendo nombre con el oso Kodiak, aunque cambiando la k final por una q, haciendo un guiño a una derivación de la legua empleada por el pueblo que convive con el oso en la isla del mismo nombre cercana a Alaska, según Skoda el SUV comparte algo más que el nombre con ese magnífico animal.
Tanto el Kodiak como el Kodiaq, presentan un gran tamaño, y cuentan con una fuerza más que suficiente para dominar la situación sea cual sea el terreno. Sin embargo, ambos abogan por una vida tranquila, sin conflicto, siendo muy familiares. Mientras que este tipo de oso es capaz de convivir en paz y armonía sin ningún tipo de lucha de poder con otros ejemplares, el Skoda también busca esa armonía, estando orientado al confort de toda nuestra familia, ofreciendo espacio para hasta 7 pasajeros.
Situándose
por encima del SEAT Ateca, con el que comparte la útil plataforma
MQB, cuenta con una carrocería de
4,70 metros de longitud cuyo diseño definitivo se esconde tras esa lona con el característico color verde de Skoda. Está previsto que el fabricante del grupo
Volkswagen levante la ya mencionada tela que oculta su imagen
durante la segunda parte del año, aunque no llegaría al mercado hasta el 2017.