Aunque muchos no lleguen a conocerlo, Skoda siempre ha tenido en su ADN un componente muy deportivo, ligado siempre con una de las competiciones automovilísticas por excelencia: los rallyes. Es por ello, que en su gama de modelos siempre hemos encontrado versiones RS, ligadas generalmente al Skoda Fabia y al Skoda Octavia.
Sin embargo, con la llegada de la nueva generación del subcompacto, el Fabia perdía su versión más picante, perdía el apellido RS, dejando solo en la familia de la deportividad al fiel Octavia. Una situación que, a tenor de la información publicada por el medio británico Autocar, podría tener los días contados, otorgando a la familia RS el protagonismo que se merece.
El citado medio se hace eco de unas declaraciones del CEO de la firma checa, Bernhard Maier, quien habría afirmado que el aumento del interés de los compradores por las versiones más altas de gama de modelos como el Octavia o el Superb daría pie a una ampliación de la gama RS al buque insignia Superb. Un modelo que ya cuenta con una impresionante mecánica gasolina de 280 CV, y que solo necesitaría unos pequeños ajustes y un look algo más agresivo para poner defender con honor los valores de la familia más deportiva de la marca checa.
En esa misma entrevista el directivo de la firma del grupo Volkswagen negaba la vuelta del Fabia RS. No obstante, nos daban alas a seguir creyendo que los RS pueden seguir creciendo, posiblemente con la llegada del nuevo SUV Kodiaq, al que no le sentaría nada mal una radical versión RS, siempre ligada a una tracción total.