Fácil de transportar debido a su reducido volumen y peso
Volvo continúa siendo una de las marcas que más piensan en la seguridad dentro de los automóviles. Esta vez, se centra de nuevo en la seguridad de los más pequeños y lo combina a la perfección con la comodidad.
Hace ya cincuenta años, Volvo presentó el primer
prototipo de asiento infantil y se inspiró en la posición en que viajaban los astronautas, es decir mirando hacia atrás. Años después continúo con la investigación y el desarrollo de la seguridad infantil con elementos como el asiento de copiloto reversible con respaldo infantil, el cojín elevador, el primer asiento en sentido contrario apto para
ISOFIX o el asiento integrado de dos alturas.
Hoy Volvo nos ha presentado el asiento infantil hinchable con la misma filosofía de hace cincuenta años, es decir, que al ir en sentido contrario a la marcha se reduce la gravedad de las lesiones en caso de accidente.
Este nuevo asiento facilita a los padres el transporte de las sillitas ya que cuando se encuentran deshinchadas ocupan un volumen muy pequeño y además pesa aproximadamente la mitad que los
asientos infantiles convencionales. Se hincha automáticamente en cuarenta segundos a través de un sistema de bombeo silencioso y además utiliza un tejido muy resistente llamado “drop-stitch” que garantiza una gran
fiabilidad.
El responsable de este nuevo asiento, Lawrence Abele, cuenta que realizó este proyecto pensando en sus hijos y en la incomodidad de transportar los asientos infantiles convencionales: «Para mí, la seguridad infantil ha sido siempre la prioridad número uno y, cuando nos mudamos al extranjero con los dos niños, tuvimos que cargar con dos voluminosos asientos infantiles por taxis y aeropuertos. Para muchas personas, viajar con niños pequeños supone un auténtico desafío; cualquier ayuda que facilite las cosas a los padres con niños pequeños es algo fabuloso».