Polestar, la división de más altas prestaciones de la firma sueca,
desarrolla para el nuevo V90 Cross Country una de sus conocidas optimizaciones, al igual que hiciera en meses anteriores con todos los componentes de la nueva gama
Volvo. Una optimización que
afecta ligeramente a su rendimiento en término de potencia, a la vez que
ajusta otros parámetros directamente relacionados con la dinámica de la conducción, como la gestión del cambio o la respuesta del acelerador.
Esta optimización Polestar, al igual que otras de las que os hemos hablado con anterioridad, no buscan la radicalidad que podemos encontrar en los modelos 100% Polestar, como los S60 y V60 con ese mismo apellido. Más bien buscan mejorar el rendimiento en el día a día, en el uso cotidiano, manteniendo intactas la usabilidad y la practicidad de este exclusivo familiar campero.
En principio, esta optimización
está disponible para las versiones D4, D5 y T6, En el primero de los casos aumenta
su potencia hasta los 200 CV, con un
par máximo de 440 NM. En el segundo
la potencia alcanza ahora los 240 CV, mientras que s par máximo se cifra en 500 NM. Para terminar, la mecánica
gasolina T5 eleva su potencia hasta los 334 CV, situándose su par máximo en 440 NM, idéntica cifra que el D4.
Junto a estas mejoras de su potencia, Polestar ha afinado, como ya adelantábamos,
la respuesta del acelerador, tanto a la hora de minimizar el tiempo de respuesta a la hora de acelerar, como mejorando las reacciones del vehículo cuando dejamos de ejercer fuerza sobre el mismo. Directamente relacionado con este ámbito se encuentra el
ajuste de la transmisión automática, reduciendo el tiempo entre los cambios de relación, así como la incrementando la precisión del mismo cambio.
Esta nueva optimización
no deja de ser un ejemplo más de la seria apuesta que Volvo está haciendo con Polestar, impulsando su crecimiento y su desarrollo comercial, en aras de hacer de ella lo mismo que
Mercedes hizo con AMG o
BMW con M.