El gran error de Kubica

DefinitivamenteRobert Kubica, tras su espectacular y grave accidente en un rally de poca monta italiano, no podrá este año estar en laF1. Sus graves lesiones en la mano derecha le obligarán a una lenta y dolorosa recuperación.Kubica, un magnífico piloto deF1, ve truncada así su carrera en la F1, me atrevería a decir, de por vida, porque otra cosa no, pero actualmente si algo necesitan los pilotos de F1 es disponer de unas manos y dedos muy ágiles para poder manipular los muchos mandos que se alojan en sus volantes.

Cierto que soy, en muchas ocasiones, irónico e incluso correoso, por no decir extremadamente crítico, y no lo seré menos en el caso deKubica y su estúpida – insisto: estúpida- afición a correrrallies. La lesión de Kubica y su imposibilidad de pilotar el Lotus-Renault, no sólo es algo negativo para él si no que también lo es para el propio equipo, ya que los patrocinadores confiaron en su momento en la habilidad y categoría de Kubica a la hora de invertir en este equipo, y hoy se encuentran con contratos firmados pero sin poder disponer del piloto que habían, digamos, “comprado”.

Los pilotos han de ser serios y responsables. Forman parte de una actividad empresarial (comercial) que se basa en lodeportivo, pero empresarial al fin y al cabo. ¿Cómo se lo han tomado los patrocinadores del equipo? No lo sé, pero me temo que muy mal. Kubica, insisto, es un gran piloto: lo ha demostrado a lo largo de estas últimas temporadas. Su nombre, junto aAlonso, Vettel y Hamilton, se ha barajado en Ferrari, en McLaren e incluso en Red Bull. Hoy, con la mano y parte de la pierna derecha destrozadas,Kubica deberá pensar que laF1, la más alta competición automovilistica del momento, para él, ha llegado a su fin. No hago leña del árbol caído, pero soy realista y en laF1 el romanticismo hace muchos años que desapareció.

Kubica, su mánager y su equipo se han equivocado y mucho. Nunca debieron dejarle participar en otras carreras que no fueran las de la F1...