La marca de los cuatro aros invertirá cerca de 22.000 millones de euros en los próximos años, un 70% de los cuales irán destinados a nuevos modelos de la marca y a tecnología mientras que el 30% restante se invertirá en ampliar la red de producción en todo el mundo.
Con este proyecto la prestigiosa compañía pasará a tener sesenta modelos disponibles en 2020, once más que en la actualidad. Gran parte de estos nuevos vehículos serán de bajo consumo y reducidas emisiones para cumplir con las cada vez más exigentes leyes anticontaminantes.
Por otro lado
Audi tiene previsto lanzar este nuevo año la tercera generación del deportivo TT; y en el 2016 el nuevo Q1, por lo que está ampliando sus instalaciones de producción en todo el mundo. La marca alemana construirá la primera fábrica en América del Norte, concretamente en la ciudad de San José Chiapa (Méjico) en la que se pondrá en marcha la línea de producción del Q5 a partir de 2016 con una previsión de creación de más de 1.000 puestos de trabajo. También se planea producir el A3 Sedán y el Q3 en Brasil a partir de 2015.
Las inversiones siguen creciendo en Hungría donde se encuentra la planta de fabricación de motores más grande del mundo, y en China está a punto de comenzar la producción en la segunda planta del país ubicada en Foshan.