La firma de la estrella continúa celebrando el que podríamos denominar sin duda alguna “el año del SUV”. Para ello, tras la reciente llegada a los concesionarios del GLE Coupé, y del nuevo SUV compacto GLC, nos acerca el nuevo miembro de la familia AMG Sports, el Mercedes GLE 450 AMG 4Matic. Recordemos que estos modelos suponen una atractiva oferta más racional que los AMG más puros, estando ahora disponible en 3 modelos: C450 AMG, GLE 450 AMG Coupé, y ahora también GLE 450 AMG.
La apariencia estética de este SUV deportivo es fiel a su apellido AMG. En vías de incrementar la exclusividad y el dinamismo del diseño de su carrocería, recibe un
kit de carrocería AMG, nuevas
llantas de aleación de 20” con diseño de 5 radios, y una
espectacular salida de escape cuádruple cromada con acabado en tono negro.
En el
habitáculo sucede algo similar. El
diseño de calidad del interior de GLE recibe un
toque picante en forma de un nuevo volante, nuevos asientos, y nuevos pedales, todos ellos de
inspiración deportiva. También incorpora instrumentación específica, detalles en
aluminio cepillado o molduras en fibra de
carbono.
Encontrándonos ante un modelo de tan altos vuelos no cabe otra que esperar un
amplío equipamiento de serie, como así sucede. Destaca particularmente el
gran número se sistemas de seguridad y de ayuda a la conducción, como el sistema Pre-Safe, freno adaptativo, Attention Assist, Collision Prevention Assist Plus,
anclajes Isofix traseros, control de presión de neumáticos, o asistente de viento lateral. De igual manera dispone de un amplío catálogo de equipamiento adicional.
El motor encargado de dar vida a este motor es el mismo que montan los otros 2 modelos
AMG Sport, ósea un
3.0 V6 gasolina biturbo con 367 CV de potencia. Ofreciendo un
par máximo de
520 NM de par, y en combinación con la
tracción 4Matic y del
cambio automático 9G-Tronic de 9 relaciones, hacen que este portentoso SUV firme el
0 a 100 en 5,7 segundos, fijando su
velocidad máxima en
250 km./h.
Para lograr sacar el máximo partido al GLE 450 AMG en cualquier situación, el modelo dispone de 5 diferentes modos de conducción: Individual, Comfort, Slippery, Sport y Sport Plus. Cada uno de ellos, previa selección del conductor, aplica ciertos cambios sobre el motor, el cambio, la suspensión y la dirección para ajustarlos al tipo de conducción que se quiera practicar.
El Individual es absolutamente programable al gusto del conductor, el Comfort será para buscar una conducción relajada, el Slippery es el ideal para terrenos o vías resbaladizas, mientas que Sport y Sport Plus pondrán a disposición todo el potencial del modelo para lograr un comportamiento totalmente dinámico.