¡Oye!, y tú: ¿cuánto ganas...?

Nadie nos cuenta lo que gana. Dicen que es una grosería hacer esta pregunta. En laF1 sí hay alguien que se ha atrevido con un tema tan delicado como este: es la revista Business Book GP, una prestigiosa publicación que cada año publica, entre otras muchas cosas, lo que ingresan de sus respectivos equipos, los pilotos deF1. En 2010, el ranking va desde lostreinta (sí, 30) millones de euros que le pagan en Ferrari a Fernando Alonso, hasta los escasos200.000 euros percibidos por Chandok y Senna en el equipo Hispania, la lista es larga y curiosa.

El mejor pagado es Alonso: 30 millones de euros son sus honorarios en Ferrari. Le sigue, aunque a mucha distancia,Lewis Hamilton (McLaren) con 16 millones. Massacobra de Ferrari 14 millones de euros. Otro grupo es el que conforman: Button (McLaren) con sus 9 millones,Rosberg  y Schumacher (ambos en Mercedes GP) con 8 millones (cobra lo mismo el joven Rosberg como el veterano Schumacher) y Kubica, 7 millones y medio.
Barrichello (5,5 millones) junto a Webber (4,2) se destacan de lo que le han pagado aVettel, actual campeón del mundo, en Red Bull: sólo 2 millones de euros, nada comparado con otros pilotos.

En el grupo de lospeor pagados, están: Chandok y Senna, que han recibido de Hispania un sueldo de 200.000 euros cada uno. Alguersuari, que también se encuentra en entre los peor pagados, al menos se ha llevado a casa cerca de400.000 euros, mientras queDe la Rosa ha recibido deSauber casi medio millón de euros.

Como puede observarse, los honorarios de cada piloto no responden a su calidad en la pista, si no que al potencial del equipo que los contrata. Estas son las cantidades recibidas de los equipos en los que trabajan, no se incluyen otros ingresos, como pueden ser los patrocinadores personales de cada uno de ellos.

No viven nada mal los pilotos deF1. Sí, claro, es un trabajo peligroso, pero me cambio yo, ahora mismo, con Chandok o Senna para meterme en el bolsillo esos 200.000 euros que es la misma cantidad que cobra el bueno de José Mª Aznar como asesor de no-sé-que-compañía-eléctrica, pero con una diferencia: el señor Aznar, como mucho puede pillar una indigestión, mientras que un piloto, aunque sea de Hispania, se puedo pegar un tortazo, como mínimo, del nueve y medio…