Range Rover L405 en el Salón de París 2012

 

Land Rover está dando un vuelco a su política para, curiosamente, mantener aquella dinámica innovadora que rompió moldes cuando se creó el Range Rover. Primero fue el triunfador Evoque y ahora es una nueva generación del Range Rover (Range Rover L405) la que deja directamente obsoleto a su predecesor. Nada menos que 420 kilos de peso ahorra la nueva versión con la incorporación de una estructura monocasco de aluminio (primer mpv del mundo que la utiliza). Sólo con este importante detalle se mejoran el comportamiento debido a la menor inercia del conjunto y la ecología, pues el menor peso es un factor importante para la reducción de los consumos y, por tanto, de las emisiones de CO2. Pero en Land Rover también han decidido variar las suspensiones delantera y trasera realizándose las nuevas igualmente en aluminio e incorporando regulación neumática independiente en las cuatro ruedas.

 

 

El apartado de capacidades off-road ha sido siempre una de las grandes fortalezas del Range Rover, y la nueva versión las mantiene e incluso mejora. La comentada reducción de peso ya es un paso adelante en este objetivo mientras que la incorporación del sistema Terrain Response de segunda generación y las nuevas suspensiones prometen ofrecer todavía más posibilidades de aventuras a los propietarios de uno de los SUV más lujosos del mundo.

 

En cuanto a confort y equipamiento el nuevo Range Rover L405 aumenta el espacio para las piernas de los ocupantes traseros en nada menos que 11,8 centímetros mientras que se ofrece un equipamiento en el que se incorporan, por ejemplo, un nuevo sistema de Sonido Sorround, la apertura y cierre automáticos del portón posterior o los últimos sistemas de seguridad activa y seguridad pasiva del mercado. Las motorizaciones disponibles será mecánicas V8 de gasolina motores TDV6 y TDV8 en diésel.

 

 

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