Porsche Cayman

El Porsche Cayman cumple siete años y lo celebra con su tercera generación, que ya fue presentada en el Salón del Automóvil de Los Ángeles en diciembre del pasado año, aunque ha sido ahora cuando ha llegado a los concesionarios españoles. Un modelo que se sitúa entre el Boxster (de hecho es la versión de carrocería cerrada de este modelo) y el mítico 911 y que, como ya lo hicieran éstos en el último año, ha incorporado novedades y mejoras tanto en el plano mecánico como en comportamiento dinámico. Más ligero, conun chasis mejorado y motores más eficientes, el nuevo Cayman se completa con la versión S, más potente y conn un equipamiento más deportivo. Sus precios, tan distintos como su carácter: 57.461 euros para el primero y 74.388 para el Cayman-S.

El nuevo Cayman comparte muchos elementos con el también renovado Boxster, aunque sus motores son algo más potentes. En el caso del Cayman standard, el propulsor es el habitual bóxer de seis cilindros, de 2,7 litros de cubicaje. La potencia alcanza la cifra de 275 caballos (265 en el Boxster) a un régimen de 7.400 revoluciones por minuto, aunque hay potencia disponible hasta las 7.800 revoluciones. El par motor máximo es de 290 Nm entre 4.500 y 6.500 rpm. Gracias a la rebaja del peso en 30 kilos, el conjunto se queda en 1310 kilos de peso (1340 en la versión con cambio automático PDK). Precisamente esta bajada de peso ha sido uno de los puntos en los que más se han afanado los ingenieros alemanes, con la utilización de aluminio y acero en diferentes partes del chasis y la carrocería. En esta última, un 44% de su superficie está fabricada en aluminio.

El resultado es una aceleración de 0 a 100 km/hora de 5,7 segundos (5,6 con cambio PDK) y una velocidad máxima de 266 kilómetros por hora. El Cayman ofrece de serie la transmisión manual de seis velocidades, dejando como elemento opcional el cambio automático PDK de siete relaciones y con levas para su accionmaiento manual, situadas por detrás del volante. Si hablamos de emisiones de CO2 y de consumos, las cifras del nuevo Cayman no dejan de ser sorprendentes es un vehículo de estas caractrísticas. 8,2 litros a los cien kilómetros y 192 gramos de CO2 por kilómetro en la versión manual, que se rebajan aún más con el cambio automático hasta los 7,7 litros y 180 gramos de CO2. En el apartado de consumo, estas cifras representan un 15% menos que en la anterior generación del modelo.

Por su parte, Cayman-S se sitúa como una variante más deportiva si cabe, con un propulsor de 3.4 litros y una potencia de 325 caballos e incrementando la cifra de par motor hasta los 370 Nm. Rebaja la aceleración de 0 a 100 km/hora hasta los cinco segundos y la velocidad máxima aumenta hasta 283 km/hora. Lógicamente, las cifras de consumo y emisiones se incrementan hasta los 8,8 litros a los cien y 2060 gramos de CO2 por kilómetro (8 litros y 188 gramos de CO2 con PDK). Con cinco caballos menos que la versión R de la anterior generación, la firma alemana ha construido un vehículo muy similar en cuanto a prestaciones , mejorando en muchos aspectos al que hasta ahora es el Cayman más potente de la gama y que en un futuro se sumará a esta generación con más elementos exclusivos.

Ambas versiones cuentan con diferentes sistemas electrónicos para convertir un coche de uso diario en una auténtica máquina de carreras. El primero es el Paquete Sport Crono, se serie en este modelo. Activando la tecla Sport, el carácter del Cayman se vuelve más fiero, los cambios se realizan a un régimen más alto (PDK) y la reacción del acelerador es más instantánea. También se puede disponer del Launch Control con el cambio PDK, que permite mejorar el registro de aceleración de 0 a 100 km/hora en 0,2 segundos. Por si fuera poco, el PASM (Porsche Active Suspension Management) es otro sistema electrónico para el control de las suspensiones para regular la dureza de cada rueda. Con este elemento, la altura de la carrocería se rebaja en 10 milímetros para incrementar la estabilidad en la conducción. Otra de las opciones puramente racing son los frenos de carbono con discos de 350 mm (315 delante y 299 detrás en el equipo de serie), reconocibles por sus pinzas de seis pistones en color amarillo.