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2008: Año negro para la automoción

Por Carlos Drake

Año negro para el motor

Estamos a comienzos de un nuevo año, el 2009, y como siempre toca hacer balance de lo que pasó en el ejercicio anterior. Si tuviera que definir 2008 con una palabra, después de mucho pensar, probablemente me decantaría por ‘crisis’. Quizá parezca un poco básica, pero creo que en un año en el que Zapatero fue reelegido presidente, en el que España ganó la Eurocopa de fútbol o en el que fue elegido el primer presidente de raza negra en Estados Unidos, creo que sí, que lo más importante ha sido la crisis, que en el sector del automóvil ha tomado tintes dramáticos con miles de empleos eliminados y que ha dejado tiritando las cuentas de resultados de las grandes multinacionales del sector, después de varios años de bonanza y de crecimiento sin freno.

En el ámbito nacional, 2008 se cierra con mal sabor de boca, para no dar la nota. Se han anunciado numerosos expedientes de empleo que afectan a miles de personas que trabajan en las plantas de producción de automóviles y componentes en España y que se han visto obligadas a irse a casa ante la falta de demanda de automóviles por parte de los consumidores, a causa de la crisis.

España registró, el año pasado, la mayor caída de ventas de automóviles de su historia, después de que se vendieran en todo el territorio nacional 1,176 millones de coches entre enero y diciembre de 2008, lo que supone una reducción de más del 28%, si se compara con el año anterior, en el que se matricularon algo más de 1,63 millones de unidades. Pero, como todos sabemos, lo peor está por llegar, y parece ser que en 2009 las cosas no van a mejorar, si no que van a ir a peor, ya que las estimaciones realizadas por las principales asociaciones del sector indican que las ventas de coches caerán este año entre un 10% y un 15%, cifras que si se suman a los datos de 2008 dan como resultado una disminución de las entregas de coches de más del 40% en dos años.

Algunos pensaban que durante el último mes del ejercicio pasado las ventas de coches se iban a recuperar un poco, en comparación con la tendencia negativa que acumulaban durante los once meses anteriores, ya que en este mes los concesionarios aumentan sus ofertas para deshacerse de coches en stock, pero los vaticinios fueron erróneos, dado que en diciembre se produjo la mayor caída mensual de la historia en España. En el último mes del año que dejamos atrás se vendieron 72.377 automóviles, lo que supone un desplome cercano al 50%. Esta debacle en diciembre se incrementó, en parte, por el aumento de las matriculaciones de coches producido en el último mes de 2008, con motivo de la entrada en vigor, el 1 de enero de 2008, de un nuevo impuesto de matriculación asociado a las emisiones de dióxido de carbono de los automóviles.

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