Obama

Dejamos hace unos días el 2009, y toca hacer balance de lo ocurrido en estos doce meses en el sector del automóvil. Las cosas no fueron fáciles durante el pasado año para los fabricantes de vehículos, ni tampoco para los gobiernos de los diferentes países, que tuvieron que intervenir en muchas ocasiones para frenar la caída libre a la que se estaba enfrentando la industria de las cuatro ruedas (también la de las motocicletas).

Dejamos hace unos días el 2009, y toca hacer balance de lo ocurrido en estos doce meses en el sector del automóvil. Las cosas no fueron fáciles durante el pasado año para los fabricantes de vehículos, ni tampoco para los gobiernos de los diferentes países, que tuvieron que intervenir en muchas ocasiones para frenar la caída libre a la que se estaba enfrentando la industria de las cuatro ruedas (también la de las motocicletas).

El Plan Prever, Renove o 2000E a la americana, como se le quiera llamar, que se puso en marcha en Estados Unidos hace poco más de un mes, ha finalizado con un rotundo éxito en todos los sentidos. Esta medida lanzada por el presidente estadounidense, Barack Obama, ha tenido una gran acogida entre los consumidores del país que han decidido comprar un coche aprovechando esta iniciativa que concedía ayudas de 4.500 dólares (3.000 euros más o menos) al que sustituyera su coche antiguo por otro nuevo, y por lo tanto, menos contaminante.

El Plan Prever, Renove o 2000E a la americana, como se le quiera llamar, que se puso en marcha en Estados Unidos hace poco más de un mes, ha finalizado con un rotundo éxito en todos los sentidos. Esta medida lanzada por el presidente estadounidense, Barack Obama, ha tenido una gran acogida entre los consumidores del país que han decidido comprar un coche aprovechando esta iniciativa que concedía ayudas de 4.500 dólares (3.000 euros más o menos) al que sustituyera su coche antiguo por otro nuevo, y por lo tanto, menos contaminante.

No sé si podemos o no podemos, pero parece que la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca ha venido acompañada de nuevos bríos y de ganas de cambiar la actual situación económica. En lo que se refiere al sector del automóvil, el primer presidente negro de Estados Unidos, ha tomado, como se suele decir, el toro por los cuernos desde el primer momento y ha puesto firmes a los dirigentes de las principales compañías del país, como son General Motors, Chrysler y Ford. Eso fue nada más llegar, pero recientemente Obama, en una comparecencia pública, estableció una fecha límite para que General Motors y Chrysler pusieran al día sus planes de viabilidad, si querían seguir recibiendo ayudas económicas.

No sé si podemos o no podemos, pero parece que la llegada de Barack Obama a la Casa Blanca ha venido acompañada de nuevos bríos y de ganas de cambiar la actual situación económica. En lo que se refiere al sector del automóvil, el primer presidente negro de Estados Unidos, ha tomado, como se suele decir, el toro por los cuernos desde el primer momento y ha puesto firmes a los dirigentes de las principales compañías del país, como son General Motors, Chrysler y Ford. Eso fue nada más llegar, pero recientemente Obama, en una comparecencia pública, estableció una fecha límite para que General Motors y Chrysler pusieran al día sus planes de viabilidad, si querían seguir recibiendo ayudas económicas.

Estamos a comienzos de un nuevo año, el 2009, y como siempre toca hacer balance de lo que pasó en el ejercicio anterior. Si tuviera que definir 2008 con una palabra, después de mucho pensar, probablemente me decantaría por ‘crisis’. Quizá parezca un poco básica, pero creo que en un año en el que Zapatero fue reelegido presidente, en el que España ganó la Eurocopa de fútbol o en el que fue elegido el primer presidente de raza negra en Estados Unidos, creo que sí, que lo más importante ha sido la crisis, que en el sector del automóvil ha tomado tintes dramáticos con miles de empleos eliminados y que ha dejado tiritando las cuentas de resultados de las grandes multinacionales del sector, después de varios años de bonanza y de crecimiento sin freno.

Estamos a comienzos de un nuevo año, el 2009, y como siempre toca hacer balance de lo que pasó en el ejercicio anterior. Si tuviera que definir 2008 con una palabra, después de mucho pensar, probablemente me decantaría por ‘crisis’. Quizá parezca un poco básica, pero creo que en un año en el que Zapatero fue reelegido presidente, en el que España ganó la Eurocopa de fútbol o en el que fue elegido el primer presidente de raza negra en Estados Unidos, creo que sí, que lo más importante ha sido la crisis, que en el sector del automóvil ha tomado tintes dramáticos con miles de empleos eliminados y que ha dejado tiritando las cuentas de resultados de las grandes multinacionales del sector, después de varios años de bonanza y de crecimiento sin freno.

Medianoche. Suena mi móvil. Es mi ex colega profesional (todos tenemos un pasado) y amigo Alessandro (que no se llama así, pero mejor dejarle en el anonimato…, ya que es mi garganta profunda…) y que trabaja en un equipo de F1 como responsable logístico. Me llama desde Sao Paolo (…me asusto al pensar lo que me va a costar la llamadita…) para contarme que en McLaren no lo tienen nada claro con respecto al rendimiento del motor de Hamilton.