Votación CAI 2012 de David Ayala

 

Mi participación en el evento es total, pues no sólo soy organizador sino que MotorGiga también es jurado y yo, a su vez, soy el presidente de este jurado. Como parte del jurado he tenido que votar y, además, justificar mi voto, lo que siempre hace que uno se sienta tremendamente responsable para con los lectores, pues la intención del CAI es ser una referencia en cuanto a objetividad, claridad y lógica en la elección del vehículo más relevante. Es relativamente sencillo decir los motivos que le han llevado a uno a votar a un vehículo, pero lo que resulta más complicado es explicar el porqué otros se han quedado fuera. Dado mi empeño en que la transparencia sea uno de los aspectos importantes de este premio, he decidido que mi explicación de voto no se limite sólo a valorar positivamente a los modelos que he votado, sino que contenga además una valoración de todos y cada uno de los modelos que han participado.

 

Con 30 puntos a repartir entre un máximo de tres vehículos, mi opinión sobre los participantes de este año ha sido la siguiente:

 

 

 

Tecnología, acabados, equipamiento, comportamiento, prácticamente todo está a un excelente nivel en el caso del nuevo Audi A6, incluido el precio. No se puede negar que se trata de una de las berlinas de lujo más recomendables del momento, pero la factura final a la que obliga está por encima de lo que un usuario medio puede calificar de ajustada y al nivel de competidores que ofrecen similares argumentos. Excelente automóvil, sin duda, pero no creo que sea destacable frente a la competencia.

 

 

Curiosamente la marca de los aros publicita este vehículo como un automóvil de estética adelantada a su tiempo. En mi opinión es precisamente su falta de personalidad (no deja de ser un Q5 en pequeño o un Q7 diminuto) uno de sus grandes defectos. Buen automóvil, tampoco sus precios de tarifa son como para tirar cohetes. Puestos a valorar un coche de su precio y segmento, el Evoque sería un opción mucho más lógica por su atrevimiento estético y buena realización general.

 

 

 

Un salto importante con respecto a su predecesor, he de reconocer que el Serie 1 ha sido una de las gratas sorpresas que he tenido entre los aspirantes al título. No obstante, no deja de ser un automóvil "normal" dentro de su segmento con un precio acorde a su imagen de lujo. Otro excelente automóvil que, a pesar de ello, no supone un hito entre su competencia.

 

 

 

Me parece un automóvil tremendamente útil y lógico como segundo vehículo de una familia o como el único de un público más joven. La estética es a mi juicio uno de sus grandes aciertos, aunque también es cierto que la sensación a sus mandos no aporta tanta calidad como otros modelos de su segmento y, aparte de la comentada estética, no ofrece muchos otros argumentos que lo conviertan en un líder.

 

 

 

De nuevo aparecen los mismos buenos argumentos que en el Aveo en cuanto a relación calidad/precio y efectiva estética. Estoy seguro que sería un buen candidato para mi si yo buscara un monovolumen pero, al igual que el Aveo, se trata de un buen automóvil que no destaca excesivamente en nada. No obstante hay que matizar en este caso que la sensación al volante es muy buena, con una calidad percibida que supera lo que exige su factura final.

 

 

La marca DS se presenta en el mercado como una alternativa a modelos de prestigio pero ello no debe significar, al menos a mi juicio, que la estética obligue a sacrificios inconcebibles como, por ejemplo, carecer de ventanilla posterior o contar con una puerta trasera cuyo diseño puede incluso generar golpes al acceder a la segunda fila. Muy bueno en estética, terminación y calidad, los contras comentados no me permiten considerarlo como una de las mejores opciones.

 

 

 

Sin duda me habría planteado muchas otras cosas si este vehículo me lo hubieran presentado hace cinco años. Es más, me encantó el Dodge Journey -que es la base del Freemont- cuando se presentó en el 2007. Mejores motores diésel, versión 4x4 y mayor refinamiento, pero el Freemont llega cinco años tarde para ser una referencia.

 

Ford Focus: 5 puntos 

Al igual que hizo Citroën el pasado año con el C4, Ford ofrece en su modelo compacto toda la tecnología que puede esperarse no sólo de un automóvil de su segmento, sino de segmentos superiores. Si el motor Ecoboost de 125 CV de potencia hubiera respondido a las expectativas de consumo que yo tenía en él depositadas, quizás hubiera aumentado su nota final, pero no es el caso. El pequeño tricilíndrico es una maravilla por ausencia de vibraciones, baja rumorosidad y empuje, pero la cacareada frugalidad en los consumos sólo es compatible con una conducción finísima que no es real, mientras que en condiciones normales de conducción es mucho más llamativo el Ecoboost de 180 CV, que es en tales condiciones sólo algo más gastón que el 125 CV.

 

 

 

Sin duda alguna, un buen coche, y cualquiera que haya tenido un Hyundai con anterioridad quedará prendado del salto cualitativo de la marca. Este aumento de calidad ha ido no obstante acompañado de una elevación en el precio que lo sitúa al nivel de rivales europeos que ofrecen tanto o más que él, lo que hace que su valoración no pueda ser superior a la media.

 

 

 

Es difícil sobresalir cuando hablamos de vehículos del segmento pequeño aun cuando se trate de buenos automóviles. El Picanto es un excelente coche pequeño, pero nada más. En el conjunto de los candidatos el Aveo, por ejemplo, ofrece una estética más llamativa, mientras que el Yaris (algo más grande y caro, eso si) cuenta con una motorización híbrida y motores diésel.

 

 

La frugalidad en los consumos y la buena realización general hacen del Rio un automóvil tremendamente destacable pero no son argumentos suficientes en su enfrentamiento con otros candidatos. 

 

 

Pocos vehículos pueden presumir de tener una herencia tan dilatada como la del Ypsilon, con una presencia en el mercado que se remonta a 1985. Esta última generación es más grande, lujosa y equipada además de ofrecerse por primera vez con cinco puertas. No obstante, se trata de una evolución que ni siquiera ha roto moldes frente a sus predecesores... menos aún comparado con la competencia.

 

De los automóviles que he probado en los últimos años ha sido el único que me ha vencido totalmente. Pensando que era sólo un Prius con otro nombre, me encontré con un compacto de lujo que ofrecía calidad, tecnología, ecología y un confort de conducción que no recuerdo en ningún otro modelo de su segmento. Desde el puesto de conducción a la sedosidad de su funcionamiento, todo es único en el CT200h sin que ello suponga un desembolso superior al de, por ejemplo, un BMW Serie 1 comparable. Lo dicho, el CT200h ha superado mis ideas preconcebidas y se ha convertido en el primer híbrido al que realmente considero efectivo además de efectista.

 

 

Aunque continúa siendo un monovolumen, el nuevo Clase B ha cambiado tremendamente con respecto a su predecesor, corrigiendo errores y mejorando aspectos tan importantes como el equipamiento y las motorizaciones. Como le ocurre a los candidatos de Audi y BMW, es un excelente automóvil con un precio acorde a lo que pide pero sin suponer una variación relevante dentro del mercado.

 

 

Otro automóvil de excelente realización y rendimiento pero sin variantes que lo convierta en un marcador de tendencias y a un nivel de precio en el que su gran calidad de realización es totalmente lógica.

 

 

Cualquier padre de familia desea tener un automóvil capaz de proporcionarle la obligatoria racionalidad de un vehículo familiar pero que no olvide su pizca de pasión. El nuevo Zafira tiene una de las líneas más atractivas -al menos a mi juicio- en el segmento de los monovolúmenes, con motores de buen rendimiento y, sobre todo, con una serie de equipamientos y soluciones prácticas que lo hacen único en su segmento. Además, la posibiildad del flexfix es un atributo que los aficionados a las bicis valoramos en gran medida, lo reconozco. Pero es que el concepto flex de Opel se hace realidad en el Zafira de tal modo que es difícil pensar en algo que no forme parte de su equipamiento de serie u opcional. Si a todo lo anterior le unimos una tarifa igualmente lógica, encontramos a un modelo que merece un alto grado de reconocimiento.

 

 

Berlina de gran calidad de rodadura, elementos como el cambio manual robotizado de un solo embrague (cuyo funcionamiento deja que desar) o un habitáculo poco apto para una confortable vida a bordo por ausencia de huecos, me llevan a descartar a este modelo de mi posible lista de la compra.

 

 

Prendado por su estética desde el mismo momento que lo vi por primera vez, el Evoque me cautivó igualmente por sus buenas cualidades camperas unidas a su excelente comportamiento en carretera. El lujoso acabado termina de rematar una faena que ha llevado a la marca a contar con un amplio listado de pedidos. Aun así, la estética se paga demasiado cara en un vehículo que tampoco tiene unos motores demasiado eficientes. Afortunadamente para Land Rover, los clientes siguen teniendo en la estética a uno de sus más importantes criterios de compra. Mi criterio racional me impide aportar más valor a este SUV que, sin embargo, sí que es un claro rompedor de tendencias.

 

 

El SEAT Mii, clónico del Skoda City y VW Up, es un modelo destinado a la ciudad que me recuerda en su oferta a lo que en su día ya ofreció el SEAT Arosa; buena relación habitabilidad/tamaño y un equipamiento suficiente para los requerimientos ciudadanos. Con un puesto de conducción mejorable y pocas soluciones llamativas, no creo que sea un vehículo para considerarse único.

 

 

Junto al Range Rover Evoque es otro de los modelos que quizás podría haber obtenido algún punto por méritos propios siempre que el híbrido sea realmente útil. Sin embargo, el resto de versiones no son sino otro buen automóvil en el segmento al que pertenece.

 

 

La berlina compacta de Volkswagen está eclipsada por el Golf pero, sobre todo, por el Passat, de quien toma además buena parte de su estética. Absolutamente tradicional en su diseño, el Jetta es como un Passat algo más pequeño, proporcionando un buen espacio general y buenas cotas de habitabilidad. No obstante, no es un vehículo llamativo que pueda presumir de marcar tendencias técnica ni estéticamente.