La gente todavía habla de CV

A pesar de llevar ya más de dos décadas dedicado al mundo del automóvil, todavía me sorprendo cuando escucho algunas conversaciones. Y todavía me sorprendo más cuando éstas se sitúan en foros en los que se supone que existe un claro conocimiento del mundo de la automoción.

Me ocurrió esto en una de mis últimas presentaciones cuando, desconozco por qué motivo, alguien se puso a hablar sobre los **CV** de los automóviles actuales y de los antiguos. Así, se hablaba de que hoy en día los coches básicos disponen de más de 100 CV y la gente los considera poco aptos cuando, hace un tiempo, potencias de 60 CV eran de lo más habitual.

No diré yo que los CV no son importantes, pero comparar un vehículo con otro sólo por su número de CV y sin considerar otros parámetros como, por ejemplo, su peso o su tipo de mecánica, es una barbaridad en el más amplio sentido del término. Pondré un ejemplo ¿Acaso es más deportivo un vehículo de 500 CV que otro de sólo 300CV? Espero que no te hayas adelantado a contestar, porque la siguiente pregunta es ¿Es más deportivo un camión Scania de 500 CV que un turismo deportivo de 300 CV?

Seguimos con las preguntas ¿Anda mejor un turismo de 115 CV que un turismo de 100 CV? Y ahora la pregunta ampliada ¿Anda mejor un turismo de 115 CV que pesa 1200 kilos que un turismo de 100 CV que pesa 900 kilos?

Y así podríamos seguir con otras características como el tipo de transmisión, el ciclo de su mecánica (diésel, gasolina, híbrido...), los desarrollos del cambio, etc...

En general la relación peso/potencia, medida en CV/kg es un dato mucho más idóneo para comparar vehículos. De ahí que por ejemplo los coches antiguos, mucho más ligeros, no tuvieran necesidad de tener tantos CV como los actuales, en los que el equipamiento, el aumento de tamaño y los elementos de seguridad han hecho subir el peso a marchas forzadas. Pero también es importante el tipo de mecánica, pues en los diésel el par motor suele ser más elevado a igualdad de potencia, lo que hace que sean mucho más eficientes a la hora de impulsar el mismo peso -sin olvidar la influencia de otros parámetros, conste-

Lo dicho, que todavía me sorprendo, pero supongo que tendré que acostumbrarme