Denominación con que fue presentado en
1924 un interesante automóvil francés de competición construido en Levallois-Perret por los socios Godet y Vareille. Caracterizado por una mecánica complicada y refinada, el Vagova gozaba, al menos sobre el papel, de unas prestaciones excepcionales en relación con su
cilindrada.
Su motor era una pequeña joya mecánica: 6 cilindros en línea (49,7 x 64 mm) con un total de 740 ce; 2 árboles de levas en cabeza con accionamiento desmodrómico de las válvulas; cabezas de
biela montadas sobre rodamientos, y cigüeñal desmontable. Su potencia era de 40
CV a 6.000
rpm. El accionamiento desmodrómico de las válvulas se obtenía mediante 3 árboles de levas superpuestos con excéntricas de perfiles distintos, entre las cuales se hallaba intercalado un balancín para la apertura y el cierre de las válvulas; la excéntrica del árbol inferior determinaba la apertura de la válvula y la del superior su cierre.
El Vagova fue inscrito en las 200 Millas de Brooklands de 1924, pero en los entrenamientos el motor se averió. El vehículo no tuvo continuación.