El aspecto industrial del automóvil se encuentra en un segundo plano para los conductores habituales, pero eso no significa que no tenga importancia para el devenir de las marcas y sobre todo de la economía de los países, especialmente en España, donde el sector de automóvil genera, tradicionalmente, alrededor del 9% del PIB. En medio de la fuerte crisis económica por la que estamos atravesando, los fabricantes han tenido que elegir las fábricas en las que se producirán sus futuros modelos y los centros españoles y, todo hay que decirlo, las administraciones locales y central, se han partido el pecho para que nuestro país no pierda peso industrial internacional, en lo que a los coches se refiere.
En estos días se están sucediendo las noticias importantes. El año comenzó con el anuncio de Álvarez Cascos de dejar el PP, luego se han sucedido otros acontecimientos como la muerte de Juanito Navarro, la negociación sobre la reforma de las pensiones y más recientemente el comunicado de ETA. Adentrándonos en las noticias relacionadas con el mundo del motor. El 2011 también ha empezado con el acelerador pisado, porque hemos conocido recientemente las matriculaciones totales de 2010, ha comenzado el Salón Internacional del Automóvil de Detroit y Fiat ha ampliado su capital en Chrysler, lo que hace presagiar una posible OPA (más adelante escribiré un post sobre este asunto).
Quien más quien menos suele ponerse alguna que otra meta cada vez que se aproxima el inicio de un nuevo año. Los propósitos más habituales son los de dejar de fumar, apuntarse al gimnasio, hacer una dieta o simplemente apuntarse a algún tipo de actividad fuera del horario laboral, del estilo de clases inglés o de cocina, aunque los hay más profundos como encontrar novio o casarse. Palabras mayores.
Siempre se habla de los efectos negativos que la actual situación económica tiene y tendrá sobre el empleo en España y en otros país. En el caso del sector del automóvil estamos hartos de oir hablar de la destrucción de puestos de trabajo que supondrá la fuerte caída de las ventas de vehículos derivada de la crisis económica.
Siempre ha habido empresas que nacen y otras que desaparecen. Es la ley de vida del sistema económico en el que estamos inmersos. El sector del automóvil, como uno de los más dinámicos de la industria, ha sido y será uno de los que más grandes compañías verá nacer en los próximos años, o por lo menos tras la fusión de dos multinacionales, y también verá cómo desaparecen otras tantas corporaciones que han dejado mucho calado entre los clientes.
Las declaraciones de los principales representantes del sector del automóvil en España han ido cambiando de dirección en los últimos tiempos y han pasado de pedir, casi con lloriqueos, la continuidad de las ayudas directas a la compra de automóviles, contempladas en el Plan 2000E, a asumir que éstas jamás llegarán y pensar en que la única solución de la actual situación es apechugar con lo que está sucediendo y tomar medidas que ayuden a salvaguardar la continuidad de los negocios en el futuro.
En las últimas semanas y en las venideras se suceden las reuniones de fin de año y las comidas y cenas de Navidad. En el sector del automóvil, tanto las marcas como las asociaciones del sector se juntan con los periodistas para hacer balance del año que se despide y para desear con todas las fuerzas posibles que lo que nos espera en 2011 sea mejor que lo que ya hemos pasado.
Por todos es sabido que el grupo estadounidense General Motors ha pasado recientemente por uno de los peores episodios de toda su historia, después de que el pasado año se tuviera que acoger a un proceso de suspensión de pagos, y de esta manera resurgir como una compañía más fuerte sin los activos tóxicos y poco rentables que habían lastrado la evolución de su negocio y, por supuesto, poniendo en marcha un contundente plan de reestructuración que permitiera mantener la viabilidad de la compañía a largo plazo.
En mi anterior post hablaba de cómo me había interesado lo que se comentó durante el Congreso anual que celebra la patronal de los concesionarios (Faconauto) y en el que se habló de todo lo que tiene que ver con el sector del automóvil y algo más. Le he estado dando vueltas y creo que también conviene comentar que en todas las ediciones de este acto se dan a conocer unas previsiones, de la mano de la consultora MSI, para lo que resta de año y para el año próximo y, como era de prever, no han sido nada halagüeñas.
He pasado toda mi jornada laboral de hoy en el XIX Congreso Nacional de la Distribución de la Automoción, que organiza cada año la Federación de Asociaciones de Concesionarios de Automoción (Faconauto). En él que suelen estar presentes grandes personalidades del sector del automóvil, que hablan de la situación actual y de lo que se nos viene encima en el futuro. También acuden los responsables de los puntos de venta que agrupa Faconauto y la prensa, vamos que nos juntamos ciento y la madre.